La tarde se presentaba prometedora para los miembros de El Fuego de la Utopía.
Era nuestros segundo encuentro con la poesía en El Mirador de la Bahía, de nuestras amigas Mara y María del Mar.
La celebración coincidía en el calendario con esa hojita que pone en rojo “Día del libro”.
Todo estaba preparado. La hora se acercaba, esa hora que estaba indicada en el lujo de cartel diseñado por nuestra amiga Nati, Natividad Vidal Aleu.
Decidimos ir al encuentro de la poesía. Esperábamos a Josefa Parra.
Nuestra alegría fue doble al comprobar que llegaba con David Naranjo que, junto a ella, nos han seguido desde nuestro “nacimiento” en Grazalema, hace casi un año, en la presentación de “Tiempo incierto”, de Juan Antonio Baena Niño.
Lleno total en el local. Público expectante. Junto a los seguidores puertorrealeños llegaron amigos desde Jerez, Cádiz, San Fernando o desde la mismísima Granada, que no se quisieron perder el evento.
Acertaron.
Público de todas las edades, en el que destacaba la presencia de gente joven seguidora de su poesía.
Irene, María y Judith (jóvenes escritoras de El Fuego de la Utopía) pusieron broche de oro a la presentación recitando entre el público versos de diferentes poemas de la poeta.
Acompañada de la música de Miguel Ángel Beltrán “Barry”, Josefa nos regaló un recorrido por toda su obra, atrapándonos (como siempre) con la magia de sus versos, de su palabra.
El público no tuvo más remedio que rendirse ante tanto derroche poético. Una hora con Josefa, que pasó demasiado rápida, dio paso al cantautor Alfonso Baro que aportó su música a las letras de la poeta.
Por si todo esto fuese poco, Josefa nos hizo todo un regalo al recitarnos poemas aún inéditos, “bocetos”, como nos dijo ella. Otro detalle más del ambiente de complicidad que creó la poeta con su público.
Así, no es de extrañar, que el público salió, con sus ejemplares dedicados en la mano, con una sonrisa en la cara, presto a decir al mundo: yo estuve allí.
Para El Fuego de la Utopía la presencia de Josefa Parra ha sido una constante en nuestra corta vida. Disfrutamos de su presencia en nuestra primera presentación y luego en diversos actos donde hemos participado.
Es todo un alivio ver que en este mundo de aguas “difíciles”, siguen existiendo personas prestas a colaborar con la gente que empieza o con proyectos que, más que la luz del neón, busca acercar y compartir el gusto por la poesía.
Gracias, Josefa Parra, poeta.
Era nuestros segundo encuentro con la poesía en El Mirador de la Bahía, de nuestras amigas Mara y María del Mar.
La celebración coincidía en el calendario con esa hojita que pone en rojo “Día del libro”.
Todo estaba preparado. La hora se acercaba, esa hora que estaba indicada en el lujo de cartel diseñado por nuestra amiga Nati, Natividad Vidal Aleu.
Decidimos ir al encuentro de la poesía. Esperábamos a Josefa Parra.
Nuestra alegría fue doble al comprobar que llegaba con David Naranjo que, junto a ella, nos han seguido desde nuestro “nacimiento” en Grazalema, hace casi un año, en la presentación de “Tiempo incierto”, de Juan Antonio Baena Niño.
Lleno total en el local. Público expectante. Junto a los seguidores puertorrealeños llegaron amigos desde Jerez, Cádiz, San Fernando o desde la mismísima Granada, que no se quisieron perder el evento.
Acertaron.
Público de todas las edades, en el que destacaba la presencia de gente joven seguidora de su poesía.
Irene, María y Judith (jóvenes escritoras de El Fuego de la Utopía) pusieron broche de oro a la presentación recitando entre el público versos de diferentes poemas de la poeta.
Acompañada de la música de Miguel Ángel Beltrán “Barry”, Josefa nos regaló un recorrido por toda su obra, atrapándonos (como siempre) con la magia de sus versos, de su palabra.
El público no tuvo más remedio que rendirse ante tanto derroche poético. Una hora con Josefa, que pasó demasiado rápida, dio paso al cantautor Alfonso Baro que aportó su música a las letras de la poeta.
Por si todo esto fuese poco, Josefa nos hizo todo un regalo al recitarnos poemas aún inéditos, “bocetos”, como nos dijo ella. Otro detalle más del ambiente de complicidad que creó la poeta con su público.
Así, no es de extrañar, que el público salió, con sus ejemplares dedicados en la mano, con una sonrisa en la cara, presto a decir al mundo: yo estuve allí.
Para El Fuego de la Utopía la presencia de Josefa Parra ha sido una constante en nuestra corta vida. Disfrutamos de su presencia en nuestra primera presentación y luego en diversos actos donde hemos participado.
Es todo un alivio ver que en este mundo de aguas “difíciles”, siguen existiendo personas prestas a colaborar con la gente que empieza o con proyectos que, más que la luz del neón, busca acercar y compartir el gusto por la poesía.
Gracias, Josefa Parra, poeta.
Gracias, Josefa Parra, persona.
7 comentarios:
Todo un derroche en el arte de transmitir.
La Poesía tomó cuerpo en la noche y todos supimos que voz tiene.
Un placer vivir esos momentos. Y todo un lujo comprobar cuanta gente joven asiste a estos actos.
¿Quién pone en duda la buena salud de la utopía?
Ese evento fue un autentico acervo energético para todos los utópicos.
Sin duda, volvería a viajar algo más de tres horas para vivir experiencias como ésa.
Gracias por colgar los videos y difundir el acto. Un verdadero lujo.
Saludos
Felicidades a todos los que conforman el Fuego de la utopía...
Besos
Y digo yo, que donde esté Juanma hay alegría y donde esté Pepa un derroche poético que nos hace temblar de emoción. Felicidades, como Asociación, como personas y como poetas y escritores que me parece que también los hay.
Una compañera de Jerez.
Magnífica exposición de una noche de amor entre el poeta, el verso y la utopía, y sí, yo creo en la utopía, aún sabiendo como es, yo la acepto, porque aún sin ser, yo la invento...
al ser prima hermana de ilusión, anima dentro, de vez en cuando.
Y sí, la gente joven cada cual a su manera, puede ser poeta.
Una adolescente a la que quiero mucho, me decía el otro día, "quizá yo no llegue a escribir o recitar poesía, tal como tú lo haces, me refiero al estilo, porque `puedo asegurarte que una misma poesía y un mismo fondo lleva el rap, incluso la guitarra más metálica, nada nos diferencia en sentirla, hay muchas formas de expresar poesía "
Me esperaba la respuesta que me llenó de alegría, a veces hay que cerrar mucho los ojos, para poder ver las cosas que solo se ven "pa dentro"... Hay muy buenos jóvenes poetas que van a esos eventos.
Un abrazo sombragris.
Cómo escribe y cómo recita nuestra Pepa Parra. Qué grande. Ojalá vuelva pronto a escuchar los versos de su boca, en especial aquella edípica.
Un saludo.
Jorge Andreu
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